Washington.- El gobierno del presidente Joe Biden enviará temporalmente mil 500 soldados adicionales para ayudar a asegurar la frontera entre Estados Unidos y México, dijo el Departamento de Defensa el martes, en preparación para un posible aumento de la inmigración ilegal cuando se levanten las restricciones fronterizas por el covid-19 más adelante.
El despliegue de 90 días de tropas en servicio activo complementará el trabajo de la Patrulla Fronteriza de Estados Unidos, pero no llevará a cabo tareas de aplicación de la ley, dijo el portavoz del Pentágono, el general de brigada Pat Ryder, en un comunicado. Llevarán a cabo monitoreo en tierra, ingreso de datos y soporte de almacén para liberar a los agentes fronterizos y «llenar los vacíos de capacidad críticos», dijo Ryder. La fuerza se sumará a un despliegue en curso de alrededor de 2 mil 500 soldados de la Guardia Nacional.
Las llamadas restricciones del Título 42, que finalizarán el 11 de mayo, permiten a las autoridades estadunidenses expulsar rápidamente a los migrantes no mexicanos a México sin la posibilidad de solicitar asilo. Biden ha lidiado con un número récord de migrantes atrapados cruzando ilegalmente la frontera entre Estados Unidos y México desde que asumió el cargo en 2021.
Los republicanos han criticado a Biden por hacer retroceder las políticas de línea dura del expresidente republicano Donald Trump, el favorito para la nominación de su partido. Algunos demócratas y activistas de inmigración también criticaron a Biden por endurecer gradualmente su enfoque de la seguridad fronteriza.
El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, cuando se le preguntó sobre el despliegue de tropas en una conferencia de prensa, dijo que Estados Unidos es una nación soberana y que México respeta sus decisiones. Las tropas militares estadunidenses se han utilizado para ayudar a asegurar la frontera durante las administraciones presidenciales anteriores, incluido el republicano George W. Bush, el demócrata Barack Obama y Trump, quienes desplegaron miles de tropas en servicio activo y de la Guardia Nacional.
Los líderes del Pentágono se han sentido frustrados durante mucho tiempo por los despliegues militares en la frontera, argumentando en privado que las tareas mundanas son más adecuadas para las agencias de aplicación de la ley y pueden afectar la preparación militar. Los defensores de la migración han criticado los esfuerzos anteriores para enviar tropas a la frontera.
«Las personas que buscan asilo deben encontrarse con profesionales humanitarios, voluntarios de bienvenida y profesionales médicos y de salud mental. No con soldados», tuiteó Bilal Askaryar, director de campaña interino de la campaña #WelcomeWithDignity.
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