Ismael «El Mayo» Zambada, uno de los líderes más notorios del cártel de Sinaloa, enfrenta 38 cargos federales, entre ellos uno por asesinato. Las acusaciones también incluyen narcotráfico y lavado de dinero, según informó una corte federal en El Paso.
El imputado, de 76 años, se presentó en silla de ruedas y escoltado por cuatro agentes del marshal federal, reflejando su delicado estado de salud, pues se informó que padece cáncer. Esta condición fue revelada durante su traslado desde Sonora a El Paso hace una semana. No se ha dado a conocer cómo se abordará su tratamiento médico mientras esté bajo custodia.
Representación legal y próximo juicio
Zambada cuenta con la representación de dos abogados: Frank Pérez, de Dallas, quien ha estado a cargo de su defensa inicial, y Ray Velarde, de El Paso. Ninguno de ellos emitió comentarios tras la audiencia. Se espera que Zambada comparezca nuevamente el 9 de septiembre en El Paso, aunque aún no se ha confirmado si el juicio comenzará en enero, como se ha especulado.
Posible conflicto de intereses
Durante la audiencia, se abordó la posibilidad de un conflicto de intereses, ya que los abogados de Zambada han representado a otros acusados de narcotráfico en el pasado. Sin embargo, el acusado expresó su deseo de que continúen defendiéndolo, pese a este posible conflicto.
La magistrada Anne Berton decidió que Zambada permanecerá detenido sin derecho a fianza y ordenó su reclusión en una instalación donde estará completamente aislado de otros presos, una medida que resalta la gravedad de los cargos y las circunstancias del caso.
La historia de «El Mayo» Zambada
Ismael «El Mayo» Zambada es uno de los fundadores del cártel de Sinaloa, una de las organizaciones criminales más poderosas y peligrosas del mundo. Su captura y los cargos que enfrenta son un golpe significativo para el cártel y la estructura del narcotráfico en México.
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